La vida está llena de signos, de símbolos. Son necesarios cuando no hay nada más que podamos hacer y son útiles cuando no hay otra forma de expresar lo que sentimos. Por eso, cuando leímos esta noticia nos decidimos a hacer algo en el colegio.
Hemos contado a los peques "el cuento", el por qué hacemos grullas con papel (Sadako Sasaki tiene "la culpa" y os recomiendo que leáis su historia) y hemos dedicado un rato a reflexionar, a pensar los deseos que cada uno querríamos enviar a Japón (que no sufran, que resuciten los muertos, que no muera nadie más ya nunca más... Incluso un niño, cuyo cumpleaños es la próxima semana, ha decidido que, cuando sople las velas, pedirá de deseo algo para y por Japón)
Os dejo las fotos...
Nuestras grullas, nuestra solidaridad, nuestros deseos, nuestro apoyo con Japón
Gran trabajo chicas y chicos, y mejor gesto para toda la gente de Japón, que de una forma u otra lo necesitan,
ResponderEliminarun besote para tod@s
Mamen, una profe de cuarto
Muchísimas gracias, guapa!! Se lo haré llegar :)
ResponderEliminarME gusta mucho, felicidades por la idea y la sensibilidad. Un abrazo, Ana
ResponderEliminarLa idea no es mía, la saqué de www.elmundo.es y, ahora, es de todos! :)
ResponderEliminarBuen trabajo.
ResponderEliminarYo tenía amigos en Astudillo hace mucho tiempo. Saludos
:) gracias, Javier :)
ResponderEliminar¿Amigos de Astudillo? ¿Qué hacías tú por tierras palentinas?
Viví mi infancia y estudié magisterio en Valladolid. Tengo familia en Palencia. En Astudillo trabajó mi padre haciendo la concentración parcelaria. Sus compañeros nos invitaron a una matanza. También he pescado cangrejos con un amigo que vivía allí. Hace tanto tiempo... Pero ya ves hay cosas que no se olvidan, ni siquiera el sabor del pan.
ResponderEliminarNo conozco muchos tuiteros del terruño. Me alegro encontrarte
Astudillo no es un pueblo que haya cambiado demasiado (hay cosas que, si algún día nos "desvirtualizamos" te contaré).
ResponderEliminar¿Dónde estudiaste Magisterio? Yo estudié en Valladolid, en Fray Luis :)
Me alegra a mí también encontrarte...
Escuela de Magisterio. Promoción 74-77. Empecé en el edificio de Plaza España y terminé en el de la Huerta del Rey.
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